Un ajuste discreto cambia ese equilibrio doméstico.
Muchos hogares mantienen el frigorífico más frío de lo necesario por costumbre o miedo a que la comida se estropee. Esa decisión se paga en kWh y en euros sin ganar seguridad real. Con un par de cifras claras y un termómetro barato puedes dar un giro inmediato al gasto mensual.
Por qué la temperatura marca tu factura
El frigorífico funciona las 24 horas. Si pides más frío del preciso, el compresor alarga sus ciclos y dispara el consumo. La horquilla que equilibra seguridad alimentaria y eficiencia está en 4 ºC en la balda central y -18 ºC en el congelador. Por debajo de esos valores, el ahorro se esfuma y la calidad de algunos alimentos empeora.
Regla práctica: 4 ºC en el centro del frigorífico y -18 ºC en el congelador. Suficiente, seguro y estable.
La microbiología respalda ese ajuste: entre 0 ºC y 5 ºC la mayoría de bacterias se ralentizan con eficacia, y a -18 ºC el congelado detiene procesos en condiciones domésticas. En la cocina, ese rango evita lechugas cristalizadas, tomates con textura harinosa y yogures que sudan hielo. Además, reduce el tiempo que el motor permanece activo.
- Aperturas frecuentes, cargas calientes y humedad ambiental elevan el esfuerzo del compresor.
- Un ajuste de 2 ºC frente a 4 ºC alarga los ciclos sin aportar ventajas en sabor o seguridad.
- El “modo súper” solo tiene sentido cuando introduces mucha comida de golpe y por un periodo corto.
El frío innecesario se paga dos veces: en kWh y en comida que pierde textura por helarse de más.
Cómo fijar 4 ºc y -18 ºc sin errores
Antes de tocar ruedas o menús, mide. Sin medición, vas a ciegas.
Qué pasa si te pasas de frío
Vegetales de hoja se congelan en los cajones, los líquidos forman cristales y el compresor encadena arranques. El resultado es una nevera ruidosa, más desgaste mecánico y un coste mensual mayor sin beneficio culinario real.
Cuándo activar el modo súper
Solo cuando metes una compra grande o alimentos cocinados que aún desprenden calor. Limítalo a 24 horas. Si lo dejas activo varios días, el consumo se dispara y el efecto neto puede costarte entre 5 y 15 kWh en un mes caluroso.
Cuánto puedes ahorrar realmente
El abanico depende de la antigüedad del aparato, del calor en la cocina y de tu tarifa. En hogares medios, pasar de 2 ºC/-22 ºC a 4 ºC/-18 ºC recorta habitualmente entre 10 y 30 kWh al mes. Con precios de 0,25–0,40 €/kWh, el bolsillo nota de 2 a 12 € de diferencia; en escenarios extremos, el mordisco llega a 20 €.
| Escenario actual | Consumo estimado (kWh/mes) | Coste a 0,30 €/kWh | Ahorro si pasas a 4 ºC/-18 ºC |
|---|---|---|---|
| 2 ºC y -22 ºC con “súper” olvidado | 70 | 21,00 € | 28 kWh ≈ 8,40 € |
| 2 ºC y -22 ºC sin “súper” | 55 | 16,50 € | 13 kWh ≈ 3,90 € |
| 4 ºC y -18 ºC con hábitos cuidados | 40 | 12,00 € | Ya optimizado |
En una cocina muy caldeada, con un combi de más de diez años y tarifa punta a 0,40 €/kWh, eliminar el “súper” y suavizar la consigna puede evitar 50 kWh en un mes crítico: eso son 20 € que no salen de tu cuenta.
Mantenimiento y hábitos que marcan diferencia
- Deja 5–10 cm libres entre la trasera y la pared para que el condensador ventile.
- Limpia el serpentín dos veces al año con cepillo o aspirador; baja la presión del motor.
- No tapes baldas con plásticos que bloqueen el flujo de aire.
- Evita meter ollas humeantes; deja templar a temperatura ambiente.
- Rellena huecos con botellas de agua si sueles tener la nevera medio vacía: estabiliza el frío.
- Aléjala del horno y del sol directo siempre que sea posible.
- En equipos sin descongelación automática, desescarcha cuando la capa de hielo alcance 3–4 mm.
Seguridad alimentaria sin gastar de más
Subir por encima de 5 ºC en la balda central acelera el crecimiento de microorganismos y acorta la vida útil de los alimentos frescos. Mantener 4 ºC no es un capricho: preserva carne y pescado crudos durante el tiempo recomendado en etiquetado y evita olores ácidos prematuros en lácteos y preparados.
Si el centro marca 0–2 ºC, estás derrochando energía y maltratando verduras. Ajusta hasta ver 4 ºC estables.
Verano y tarifas variables: pequeños gestos que suman
Planifica aperturas para agrupar tareas y reducir el tiempo con la puerta abierta. Cocina en horas valle y deja enfriar fuera antes de guardar. Si usas discriminación horaria, programa el “modo súper” solo cuando metas una gran compra en periodo barato y desactívalo después.
Guía rápida para medir sin complicaciones
- Termómetro analógico o digital sencillo: 5–8 €.
- Prueba en la balda central, no en la puerta ni pegado a las paredes.
- Repite la medición al cambiar de estación o si notas hielo o condensación.
- Un enchufe medidor te dará el dato que manda: kWh diarios antes y después del ajuste.
Información complementaria para afinar aún más
Si convives con personas mayores, niños o alguien inmunodeprimido, mantén el 4 ºC con mayor disciplina y evita sobrecargar baldas para que el aire circule. Colocar un imán visible con “4 ºC / -18 ºC” ayuda a que toda la familia respete el ajuste y no toque el selector sin medir.
¿Tienes etiqueta vieja de 400–600 kWh/año? Valora el recambio cuando toque, pero no corras: una buena puesta a punto y un ajuste correcto pueden recortar el gasto este mismo mes. Deja registrado el consumo de siete días y compara con tu nueva configuración. Esa diferencia, multiplicada por el precio del kWh de tu contrato, te dirá si estás en el tramo de 2–12 € o si rozas los 20 € en semanas de calor fuerte.










Super clair, merci ! Je pensais que 2 ºC gardait mieux les aliments, mais j’ai fini avec des laitues gelées… Après passage à 4 ºC au centre et -18 ºC au congél, ma prise mesureuse affiche env. 0,3 kWh/jour de moins. Le truc du verre d’eau + thermométre est top. Question: pour un No Frost, tu conseilles d’attendre 24 h complètes entre deux réglages, même si on ouvre très peu ?