La escasez de mano de obra en construcción ha movido los sueldos. La titulitis, en cambio, ya no garantiza una nómina brillante. La pregunta pica porque toca orgullo, esfuerzo y realidad. Y porque la respuesta no es tan obvia como suena.
El sol apenas levanta y ya huele a cemento. En la valla metálica cuelgan cascos amarillos y una radio machaca un reggaetón cansado. Un oficial de primera se guarda los guantes en el bolsillo trasero, mira el reloj y suelta: “Hoy salgo tarde, hay hormigonado.” A diez kilómetros, en una oficina de cristal, una ingeniera abre su Excel con un café tibio y calcula cargas para un puente que aún es un plano. Ambos piensan en la nómina del viernes. El dinero no lo es todo, pero cuando no alcanza, duele. La curiosidad es inevitable: ¿quién gana realmente?
Lo que dicen los números hoy
La media no cuenta toda la historia, pero dibuja el mapa. En España, un albañil oficial de primera se mueve entre 20.000 y 28.000 euros brutos al año, con picos de 30.000-34.000 en plazas calientes como Baleares, Guipúzcoa o la Costa del Sol. Un ingeniero junior suele arrancar entre 24.000 y 32.000, y el salto a 40.000-50.000 llega con experiencia o sectores dulces (industrial, energía, tech). Todo cambia al mirar el reloj: el salario “por hora real” abre los ojos.
Pongamos nombres. Miguel, 38 años, albañil en Mallorca, trabaja 9,5 horas en temporada con sábados alternos. Entre pluses, horas extra y dietas, se planta en 2.300-2.700 euros netos al mes en 12 pagas. Ana, 27, ingeniera civil en Zaragoza, jornada cerrada y teletrabajo un día a la semana: 1.700 euros netos en 14 pagas, sin extras. Los dos pagan alquiler, los dos llegan cansados. La comparación, a fin de mes, sorprende.
Una regla sencilla ordena el caos: divide tu ingreso neto anual entre tus horas reales trabajadas. Ahí aparece el **salario real por hora**. La obra mete horas y pluses, la oficina aporta estabilidad, formación y carrera. El albañil cobra hoy una prima de escasez y esfuerzo físico. El ingeniero, si no cambia de empresa o sector, crece lento. Y todo varía por ciudad, convenio y pagas: **14 pagas** no es lo mismo que 12, aunque el bruto sea igual.
Cómo comparar bien tu salario (sin trampas)
Empieza por una hoja en blanco. Suma tus ingresos netos del año, incluyendo pagas extra, variable y dietas monetizadas. Cuenta horas reales: jornada, extras, viajes y sábados. Divide. Ese “€/hora real” te dice más que cualquier bruto. Añade un apunte: ¿hay EPI, desplazamientos pagados, manutención o plus de peligrosidad? El método cabe en una nota del móvil y evita autoengaños.
Los errores clásicos se repiten. Comparar bruto a 12 con neto a 14. Olvidar extras en temporada alta. No valorar el tiempo de desplazamiento. Confundir “dietas” con salario. Creer que todos los ingenieros cobran como en software o que todos los albañiles viven de la obra pública. Seamos honestos: nadie hace ese cálculo todos los días. Hazlo una vez bien y úsalo para negociar sin gritar.
Hay un detalle que calma discusiones: dibuja tu “precio hora vital”, el mínimo con el que cubres vida y margen. Luego mira mercado y decide. Todos hemos vivido ese momento en que miras tu nómina y piensas “algo no cuadra”. A veces no cuadra de verdad.
“En la obra te pagan por sudor y por tiempo; en la ingeniería te pagan por decisiones que ahorran dinero o evitan riesgos. Cuando ambas cosas escasean, sube el precio.” — Juan, capataz, y Marta, jefa de obra
- Checklist rápido: 12 vs 14 pagas.
- Horas reales al año (incluye extras y desplazamientos).
- Pluses: peligrosidad, nocturnidad, dietas.
- Estabilidad, formación, promoción y salud.
- Ciudad y convenio: la geografía manda.
Más allá del sueldo: carrera, salud y tiempo
El dinero es una foto, la carrera es el vídeo. Un albañil bueno, con oficialía y manejo de encofrado, carretilla o soldadura, puede saltar a encargado y acercarse a 32.000-40.000 euros brutos, incluso más con obra grande y variable. Un ingeniero que aprende gestión, licitaciones o BIM pega saltos a 45.000-60.000 con responsabilidad real. La pregunta ya no es solo “¿quién gana hoy?” sino “¿quién tendrá tramos de subida mañana?”. Cambia también el cuerpo: rodillas, espalda, piel. Y cambia la cabeza: estrés de plazos, licencias, informes. Tus 20 no son tus 45. Tu mejor jugada es combinar realidad inmediata con plan a 3-5 años: curso, certificación, un cambio de provincia, un giro de sector. A veces, la diferencia entre ganar “bien” y ganar “mejor” es una conversación incómoda con tu jefe y dos noches a la semana estudiando.
Hay otra variable que no sale en la nómina: el tiempo que controlas. La obra abraza la temporada y los fenómenos. La oficina abraza el buzón y las revisiones. Una tarde de parque con tus hijos puede valer más que cincuenta euros extra. O un sábado de obra puede financiar las vacaciones que no te quieres perder. No hay una respuesta universal. Hay decisiones con consecuencias muy concretas. **Una oferta que suena bien no siempre mejora tu vida.**
El futuro aprieta por los dos lados. La construcción necesita manos, y esa escasez sostiene sueldos al alza en zonas donde la vivienda arde. La ingeniería se retuerce y se multiplica: energías renovables, data centers, rehabilitación energética, digitalización de obra. El que aprende lo que el mercado pide gana altura. El que se queda quieto, pierde. La pregunta inicial ya suena distinta: quizá no sea “albañil vs ingeniero”, sino “persona concreta vs mercado concreto”. Ahí nacen las oportunidades.
La conversación seguirá en el bar y en el grupo de WhatsApp, claro. Porque detrás del dinero hay proyectos de vida. Hay alquileres que suben, jefes que bajan el tono cuando dices “me voy”, ciudades que pagan distinto por el mismo trabajo. Tal vez te toque escribir tu propia comparativa y compartirla con alguien que la necesite. Las respuestas llegan cuando nos atrevemos a mirar el reloj y hacer las cuentas, sin mito y sin miedo.
| Punto Clave | Detalle | Interés para el lector |
|---|---|---|
| Salario real por hora | Divide neto anual entre horas efectivas | Comparación justa entre obra y oficina |
| Carrera y techo salarial | Albañil: encargado/obra grande; Ingeniero: gestión/BIM/energía | Cómo crecer en 3-5 años |
| Geografía y convenio | Baleares, Guipúzcoa y costa elevan sueldos; interior más estable | Decidir dónde compensa trabajar |
FAQ :
- ¿Gana más un albañil que un ingeniero en 2025?En plazas calientes y con horas extra, un albañil puede superar a un ingeniero junior. A medio plazo, la ingeniería suele abrir techos más altos.
- ¿Qué ingeniería paga mejor hoy?Software, energía, data centers y project management técnico están en la parte alta: 40.000-70.000 euros con experiencia.
- ¿Cuánto puede ganar un albañil autónomo?Depende de tarifas, clientes y gastos. Con 25-35 €/hora facturada y agenda llena, el neto puede superar el de nómina, con más riesgo y menos red.
- ¿Cómo negociar una subida real?Llega con datos: tu “€/hora real”, ofertas comparables y valor generado. Propón escalones y formación ligada a resultados.
- ¿Merece la pena cambiar de ciudad por sueldo?Si el incremento supera alquiler y vida, sí. Calcula coste total y red de apoyo. Un 15-20% de mejora puede ya compensar.










Buenísimo. Comparar por “€/hora real” cambia la película: mi nómina a 14 pagas parecía mejor, pero contando desplazamientos y sábados, baja. ¿Podríais incluir un ejemplo con horarios variables y plus de peligrosidad? Eso ayudaría a negociar sin cuentos.
¿Y los aprendices y peones? Casi ni se mencionan y su realidad es otra.