Jon Hernández, experto en IA: «La gente está utilizando ChatGPT para buscar conocimiento y ese es el mayor error»

Jon Hernández, experto en IA: "La gente está utilizando ChatGPT para buscar conocimiento y ese es el mayor error"

Jon Hernández, experto en IA, lo dice sin rodeos: si vas a pedirle conocimiento, vas por mal camino. La pregunta no es qué sabe la máquina. Es para qué la usas.

La cafetería estaba medio vacía y el barista espumaba la leche como si fuera un ritual. A mi lado, un chico con portátil escribía: “Explícame Kafka en 5 puntos y dame fuentes”. La respuesta llegó en segundos, impecable, limpia. El texto brillaba tanto que nadie habría dudado de él. A dos mesas, una profesora pedía actividades para explicar el clima a niños de diez años. Todo salía fluido, sin fricción. Todos hemos vivido ese momento en el que una respuesta rápida te salva el día y te quita un peso de encima. Jon Hernández mira esa escena y niega con la cabeza. Ahí está el error.

Buscar no es pensar: la confusión que nos cuesta criterio

La idea es seductora: preguntas algo, te devuelven “la verdad” y te ahorras tiempo. ChatGPT responde con naturalidad y eso crea un espejismo de certeza. **ChatGPT no es una biblioteca, es un espejo estadístico del lenguaje.** Reconstruye patrones, completa frases, te “adivina” la intención. Si esperas conocimiento estable y verificado, el terreno tiembla. Y cuando tiembla, el criterio se resquebraja.

Jon Hernández lo ve a diario en equipos que sustituyen búsqueda por conversación. Piden “mejores métricas de producto” y reciben un catálogo impecable… con definiciones mezcladas, nombres anticuados y ejemplos de otro contexto. Hay estudios que muestran tasas notables de respuestas inventadas, sobre todo en temas poco populares o muy nuevos. El tono convence, la forma seduce. El fondo, a veces, hace agua. Y en ese “a veces” se pierde una tarde, un proyecto, una decisión.

La explicación de fondo es clara: un LLM predice la siguiente palabra más probable según su entrenamiento. No compara hechos ni “consulta” una base viva de realidad. Por eso Hernández insiste: confundir “recuperar conocimiento” con “generar lenguaje” conduce a errores silenciosos. Pide al modelo que razone contigo, no que te sentencie. Pídeles procesos, hipótesis, alternativas, estructuras. Para hechos, contrasta con fuentes externas, actualizadas y legibles por humanos.

Cambiar el uso: del oráculo al copiloto de pensamiento

Hay una manera simple y potente de enderezar el rumbo: pide pasos, no verdades. Empieza por “ayúdame a pensar X” y no por “dime qué es X”. Solicita marcos: “propón 3 hipótesis rivales”, “genera un árbol de decisión”, “formula 5 preguntas que invaliden mi idea”, “resume contraejemplos”. **Pedirle verdades es como pedirle a un GPS que invente carreteras.** En cambio, si lo usas para estructurar, contrastar y reformular, se vuelve un copiloto que no estorba.

Otra palanca: dale contexto y límites concretos. Describe tu caso, tu sector, tus métricas, el objetivo y la audiencia. Pídele que te pregunte antes de responder, que exprese incertidumbres y que marque lo que es suposición. Seamos honestos: nadie hace eso todos los días. Por eso conviene preparar plantillas de prompts que te recuerden el método cuando vas con prisa. Y cuando la respuesta parezca perfecta, frena y contrasta. Tu yo de mañana te lo agradecerá.

En palabras de Hernández, no se trata de desconfiar de la IA, sino de recordar su naturaleza.

“La gente está utilizando ChatGPT para buscar conocimiento y ese es el mayor error. Pídele pensamiento, no certezas.”

Aquí un esquema rápido que funciona con estudiantes, marketers y devs:

  • Pregunta-guía: “¿Qué no estoy viendo?”
  • Formato: hipótesis, contraejemplos, métricas.
  • Chequeo: dos fuentes humanas o institucionales.
  • Salida: síntesis con límites explícitos.

**El valor real está en cómo lo usas, no en lo que dice.** Y ese “cómo” se entrena.

Lo que nos jugamos al delegar el criterio

Usar ChatGPT como buscador nos roba algo silencioso: el músculo de dudar bien. Ese músculo es incómodo, exige fricción, trae preguntas raras. Si lo cedemos a un texto plausible, perdemos olfato. Cuando Jon Hernández repite su idea, no busca asustar, busca devolver el control a quien lee. Porque el control no está en saberlo todo, sino en el diseño del proceso con el que decides.

Punto Clave Detalle Interés para el lector
No es buscador Genera lenguaje plausible, no verifica hechos Evita decisiones basadas en certezas falsas
Usa procesos Pide hipótesis, marcos, contraejemplos y pasos Piensas mejor y descubres ángulos ciegos
Contrasta Chequea con fuentes humanas e institucionales Más confianza y menos retrabajo

FAQ :

  • ¿Entonces no sirve para aprender?Sí sirve para entender conceptos y crear primeras aproximaciones, siempre que contrastes después. Úsalo para analogías, resúmenes y preguntas que tensen tus ideas, no como autoridad final.
  • ¿Cómo pido fuentes de forma útil?Indica: “cita 3 fuentes verificables con enlace y fecha, y explica qué parte respalda cada afirmación”. Luego visita los enlaces y revisa la calidad y la actualidad, no te quedes con el listado.
  • ¿Qué hago cuando veo que alucina?Pide que liste sus incertidumbres, reformula tu prompt con más contexto y limita el dominio. Cambia a preguntas comparativas (“A vs B”) y valida con dos fuentes externas antes de decidir.
  • ¿Es mejor usar Google o ChatGPT?Úsalos juntos. ChatGPT para estructurar, generar hipótesis y preparar criterios; Google (o bases especializadas) para evidencias frescas y datos que alguien ya publicó y firmó.
  • ¿Algún prompt que mejore mi criterio?Prueba: “Haz de sparring: formula 5 objeciones fuertes a mi plan”, “Dame 3 marcos para evaluar este problema”, “¿Qué señales me indicarían que estoy equivocado?” y “¿Qué cambiaría si fuera X y tuviera Y restricciones?”.

2 comentarios en “Jon Hernández, experto en IA: «La gente está utilizando ChatGPT para buscar conocimiento y ese es el mayor error»”

  1. Très interéssant. Passer de “dis‑moi la vérité” à “aide‑moi à penser” demande un vrai effort de méthode; avez-vous des modèles de prompts prêts à l’emploi ?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio